-por favor no... no sigan... por piedad!...- la sangre salpicaba su rostro siendo arrastrada al centro de la habitación, mujeres la rodeaban y la sangre brotaba de su cuello cubriendo el cuerpo de la joven con aquel intentos rojo carmesí, el estruendo de la tormenta era ensordecedor.

En un internado de nueva orleans una pequeña de cabello platinado había sido abandona 15 años atrás, ahora se levantaba agitada entre sabanas viejas y desgastadas un crucifijo en la cabecera, con solo una ventana que dejaba ver la tranquilad de una noche de primavera, levanto su mano y la observo un segundo aun pido sentir el calor húmedo de la sangre sobre esta. - Que fue eso...- susurro para si aquellas pesadillas la atormentaban desde que tenia uso de razón, suspiro intentando alejar sus pensamientos antes de que la puerta se abriera.

-Eliza... levántate... - dijo una de las monjas acompañada por una mujer mayor próxima a lo 50, fue esa noche que la vida de una pequeña joven cambio brutalmente. Tuvo un nuevo inicio y un nuevo Nombre Elizabeth Bouthellier, dedico los próximo 15 años de su vida a estudiar la historia de la antigua academia pero mas que eso a estudiar ocultismo y criaturas míticas, fue la unión de ambos temas que abrió sus ojos la única realidad.

La noche mas oscura de la familia Bouthellier, no fue solo sangre y maldad humano fue el sacrificio para invocar viejas puertas del infierno y el paraíso, una puerta que solo pudo mantenerse abierta un par de minuto apenas dejando escapar algunas de las esencias mas puras o malignas del infierno y paraíso. Los hombres que intentaron el sacrificio no tenían las fuerzas necesarias para sostener la energía del portal.

Ahora ella había tomado esa misión, buscar las cinco almas necesarias para abrir el portal y descubrir lo que realmente había pasado y el motivo de por que aquellos hombres habían entrado.

Era ese el motivo de la villa y el reformatorio al igual que las cartas enviadas, sus fondos eran de un donado anónimo, cosa que no le importo ahora ella tenia la llave del portal solo necesitaba los pilares para sostenerlo.